En este artículo,José Minetto, integrante de Acep La PAMPA, nos brinda una perspectiva única sobre cómo estas tres áreas, Cambio Climático, Energía Renovable y Cooperativismo, se entrelazan para transformar nuestra provincia.
Años atrás se utilizaba la locución latina statu quo para referirse a una serie de circunstancias que daban una aproximación a una realidad que era, en el mayor de los casos, estática. Hoy ha quedado perimido en virtud de la vorágine con que sobrevienen acontecimientos y se suceden nuevos paradigmas. En este aporte reflexionamos sobre las urgencias que le caben a la provincia de La Pampa en el marco del cambio climático y, en virtud de ello, la necesidad de adoptar medidas y estrategias particulares. Porque si algo sabemos en La Pampa a la luz de lo que viene sucediendo desde hace años con el Atuel; es que los recursos naturales no conocen de límites ni fronteras pues vemos una degradación ambiental en nuestro territorio y un oasis en la provincia contigua.
Argentina es considerada uno de los países con mayor potencial para la generación de energía eléctrica proveniente de matrices renovables así quedó reflejado en el 2023 con la Mesa Redonda en la que participó el gobierno de la provincia, junto a la Secretaría de Energía de Nación y la Embajada de EEUU en el marco del encuentro Proyecto NetZERO realizado en Santa Rosa. En virtud de ese encuentro quedó fundamentado que las perspectivas para la producción de energías renovables en nuestro país y, por ende, también en La Pampa son excepcionales por los recursos disponibles y condiciones atmosféricas. A este respecto en el caso de la generación solar fotovoltaica según el Atlas de Energía Solar de Argentina más de la mitad del territorio recibe una irradiación solar media anual superior a los 3,5 Kwh/m2 lo que lo hace técnicamente viable. Este mapeo incluye a gran parte del oeste de la geografía de La Pampa precisamente, en este sector, es el que se ha construido un parque fotovoltaico (Departamento Loventue). En tanto que las experiencias en la zona más occidental en cuanto a rendimientos de generación son mucho menores en el periodo invernal tal como está demostrado en la iniciativa llevada adelante por la comisión de Fomento de Pichi Huinca.
Los esfuerzos públicos en La Pampa se cristalizaron en una visión estratégica en el año 2006 al crearse Pampetrol SAPEM con la finalidad de promover la actividad hidrocarburífera proyectando su desarrollo a mediano y largo plazo. En el 2020 a través de la Ley 3285 se convirtió en una empresa de energía con la posibilidad de intervenir en el Mercado Eléctrico a través del Plan de Energía provincial para atraer inversiones públicas y privadas, instrumentalizando puentes con diversos actores para generar energía de matriz renovable.
El mapeo de las localidades en las que es necesario reforzar la potencia fue definido por parte de la Administración Provincial de Energía (APE), a saber: Algarrobo del Águila, Victorica, Caleufú, Intendente Alvear, Realicó y General Pico. Para el caso de Victorica: Pampetrol SAPEM invirtió en la construcción de un Parque Fotovoltaico de 7 MW que ya se encuentra en etapa de prueba y estaban en carpeta otros dos parques (Realicó y General Pico) que, ante el cambio del escenario Nacional, quedaron en stand by.
El cambio climático y la generación de energía tienen un denominador común a nivel planetario que son las emisiones de gases invernadero y, en La Pampa, le agregamos otro complemento de no menor importancia que es la fuerte presencia de un acendrado sistema cooperativo fundamentalmente en la distribución de la energía. Las cooperativas son entidades solidarias que surgen en situaciones de crisis o, en su defecto, en el esfuerzo compartido para un determinado fin. El sistema cooperativo en La Pampa es sólido y está distribuido por toda la geografía provincial contabilizando más de treinta entidades la mayoría de ellas constituidas para vehiculizar la energía eléctrica directamente al consumidor que adquieren a la APE y que incluso están agrupadas en una institución de segundo grado la Federación Pampeana de Cooperativas (Fe.Pam.Co.). Los instrumentos que brinda el cooperativismo son óptimos y hoy están subutilizados y no siempre fue así en la provincia existen nuevos desafíos en los que tienen que comprometerse a trabajar. En la apertura de este articulo aludo al dinamismo y a los cambios de paradigmas cada vez con mayor velocidad y, la economía social-solidaria identificada con las cooperativas, ha quedado anclada en los viejos esquemas perdiendo esa capacidad intrínseca que la caracterizaron históricamente.
A modo de conclusión sobre este análisis, sostengo la imperiosa necesidad sobre el desafío de aunar esfuerzos cooperativos, públicos y privados en pos de la producción de energías que nos dé autarquía como viene planteando el gobierno provincial e incluso, yendo más allá, incursionar en el Mercado de Bonos Verdes que a todas luces es lo que tanto la Unión Europea como la Organización de la Naciones Unidas (ONU) y diversas entidades bancarias y financieras están generando las herramientas de cuantificación.
La producción de energía con nuevas matrices, la cuantificación de la reducción de gases invernaderos traducidos en Bonos y la autarquía en el suministro de energía con los actores que ensayo en el presente artículo (Público, Privado y Cooperativo) nos perfilaría como provincia acreedora en ítems que el Planeta se ha propuesto como horizonte. Y La Pampa posee las condiciones para hacerlo falta la decisión política de los protagonistas de la ecuación, es decir, el entramado cooperativo, público y privado.
